Interludio IV. Índice y notas.
Este nuevo interludio es una continuación anímica de mi anterior reflexión. Desde el tercer interludio hasta ahora ha habido pocos avances en el tema de los relatos pero no ando descontento por el resultado ya que incluso habiendo menos entradas con respecto al anterior período (11 frente a 17), creo que he conseguido mejorar algo la calidad de la escritura o al menos he podido asentar el perfil de algunos relatos más largos que serán antesala de las historias creadas por fascículos. Durante este breve periodo de tiempo he podido compartir una breve recopilación de rimas improvisadas, algún que otro poema como Brisa sin luz y olvido y una prosa poética, Sueño de otoño, que me ha recordado a los sueños que solía plasmar en mi primer blog, más que por el contenido, por la forma versátil, intuitiva y libre de narrar aquello que se percibe desde los ojos del alma. Esta reducción en la publicación no es en sí un fracaso o una retirada ya que las condiciones durante toda esta temporada han sido duras y el resultado ha sido mejor que lo esperado aunque lejos todavía de mi ideal de subir cuatro entradas al mes.
Entre los logros puedo hacer mención del cumplimiento de dos objetivos principales. El primero de ellos ha sido la migración y renovación del blog, convertido ahora en una web propiamente dicha, enfocada al ámbito más profesional y hacia un público más selecto. Esto me ha permitido no sólo tener mayor control sobre la configuración del blog, sino también implementar herramientas de SEO más avanzadas, plugins de seguridad, estadísticas completas y algo muy importante: la gestión y administración de una lista de correo propia. El segundo de ellos ha sido el crecimiento de mi blog secundario, con abundantes entradas hasta ahora, algo que me ha permitido sentir que estoy aprendiendo cosas nuevas más allá de los libros y los cuadernos. La razón de mantener ambos proyectos por separado es que no quiero eliminar la coherencia de mi web principal, con ese hilo conductor entre relatos, poemas y una atmósfera oscura vinculada al romanticismo, al terror o la literatura noir.
No obstante, a pesar de estos dos objetivos me he visto desanimado por muchas razones. Al igual que en mi primera caída fuerte entre octubre y diciembre de 2019 y la operación posterior, en 2021, tuve que ser intervenido en varias ocasiones, una de urgencia, en mayo del año pasado debido al efecto del estrés sobre mi enfermedad. Fueron situaciones complicadas donde me vi solo ante la enfermedad y a la menesterosa necesidad de reencontrarme con mi sombra, renovar pactos y reencontrarme con fantasmas de mi pasado. Durante este oscuro periodo decidí abandonar las redes sociales perniciosas y centrarme en mi nuevo grupo de estudio. El dolor que siento se ha ido atemperando mientras sigo tomando analgésicos diáriamente pero todavía sigue ahí, carcomiendo los restos de existencia. Mi vida onírica, los sueños que me habitaban han ido desvaneciéndose para dar espacio a horrendas pesadillas. Empero, recientemente volví a tener algunos sueños bonitos que parecen marcados por el espíritu seriotológico de algún ser o entidad que trata de guiarme en la más fría penumbra. Han pasado meses desde mi último sueño con Anna, pero además del sueño de la tempestad que recientemente pude inmortalizar, también soñé con una casa gris y con un árbol extraño, esencias radicalmente distantes pero que deben ser igualmente retratadas en forma de relatos. En el último sueño de Anna, en 2021, ella estaba con los pies en una especie de riachuelo campestre y a su alrededor había una abundante flora llena de desdibujadas flores de colores flamígeros. Ella me enseñaba una granada que sostenía entre sus manos, una granada grande y redonda partida en dos trozos sobre su mano, mostrando la madurez y el rojo sanguíneo de sus adentros. De momento todo lo que ella me ha vaticinado se ha cumplido.
A pesar de este primer reencuentro con el sendero perdido, he de decir que para mí fue una gran decepción encontrar la poca acogida que tuvo mi primera campaña de contribuciones. Como ya dice en su momento abrí la posibilidad de participar en el desarrollo del proyecto. Coloqué un enlace de donativos en paypal de otras dos páginas muy utilizadas; me parecía una opción más acertada hacer públicos los relatos y esperar algo de colaboración antes que publicarlos directamente en formato ebook por Amazon a bajo coste ya que así cada cual podía dar según sus posibilidades o lo que considerara justo. No obstante, me he sentido defraudado por el hecho de que nadie colaborara en la campaña (habiendo ya más de 45.000 seguidores en FB) aun dando a entender que los gastos iban a ser destinados al mantenimiento de los proyectos, que siempre habría transparencia en los donativos y que además de las donaciones también había otras formas de contribuir gratuitamente compartiendo mi proyecto con amigos, haciendo colaboraciones mutuas con otros escritores, enviando audios para el podcast o simplemente, haciendo comentarios o críticas de los relatos a través del formulario. Este fracaso hace que me replantee mis objetivos a largo plazo. Esta experiencia ha sido muy chocante e inesperada; nunca pensé que podría dedicarme exclusivamente a la escritura o la divulgación pero tampoco entiendo cómo la gente puede dar donativos a cualquier persona por Internet que lo solicite (sean estafadores, lobbistas o personajillos plagiadores que sólo saben robar el contenido ajeno) y sin embargo, se vean incapaces de dar un sólo euro a un proyecto multidisciplinar que lleva desde 2011 subiendo relatos, poemas y entradas de arte de manera desinteresada. Siempre he intentado ser realista y no hacerme grandes expectativas, pero la verdad es que la realidad final estaba incluso por debajo del pesimismo que siempre me ha marcado. De todas formas intentaré dejar un nuevo mensaje sobre la importancia de las colaboraciones y de utilizar la suscripción por correo, ya que si migrara de blog, desapareciera la página de Facebook o le pasara algo a la web, la lista de suscriptores por correos sería el único nexo estable para poder retomar contacto con los seguidores. A pesar de estos fracasos, quiero agradecer desde aquí a los usuarios que de momento se han suscrito por correo, a las personas que me han mandado audios para el podcast, a los mensajes de gratitud que algunos me habéis mandado por tumblr y a los dos usuarios que me ha seguido desde WP y en Wattpad. Gracias por poner vuestro grano de arena.
En cuanto a mis proyectos para este año, de momento voy a intentar establecer un horario fijo para la corrección de los relatos que voy a publicar por Amazon, un tiempo determinado para corregir el libro que ya tengo terminado y algunos proyectos de relatos para el blog. Van a seguir sucediéndose relatos, cartas y poemas, aunque esta vez voy a colgar también algunas series nuevas de relatos, poemas ajenos y algunos textos más experimentales tipo Anomalías y El baile de los gurruminos. Gracias por leerme. Esperemos que este año, al menos las cosas no vayan a peor aunque eso lo veo difícil.